Vocento y Santa Lucía

El Grupo Vocento no escarmienta, Ave María, y sigue sin entender que sus problemas no se arreglan mientras no pongan al frente de la empresa y de sus medios a profesionales del primer nivel y no mantengan la dignidad y el respeto a los demás en la defensa de la libre competencia, en línea con el compromiso de los valores y los principios que han marcado su trayectoria editorial, al menos en lo que fue el diario ABC (R.I.P.). Algo que ya no será fácil de recomponer hasta que no pongan en la calle a ese conspirador de vía estrecha que es Diego Alcázar (y Pedrín Recarte) y al coronel Vargas, jefe de los Soprano, al que se le acaba de ocurrir la genialidad de extender la guerra abierta con el diario La Razón a Onda Cero Radio, dos frentes a la vez y por el mismo precio.

Y todo ello para fracasar en ambas maniobras y dejar en entredicho a los Luca de Tena —“Las que lloran/ pobrecillas/ por las calles de Sevilla/” en clara complicidad con las compulsivas andanzas de El Petiso de ABC— y a los Ybarra y Urrutia, que son, en última, o más bien en primera instancia, autores de semejante colección de disparates que nada tienen que ver con las más elementales normas de la competencia —por las que denunciaron a la COPE—, ni con las de la cortesía entre empresarios, profesionales de la información y personas de buenos modales y bien vivir. Pero, pregunto: ¿de qué dan clase en la academia de Diego Alcázar y Pedrín Recarte: de lucha libre, de pilates o de tai chi? Y añado ¿cómo le consienten Emilio Ybarra y Guillermo Luca de Tena estos atropellos al club de Los Soprano?

Vamos por partes. Ahora que el cardenal Rouco va a expulsar de la COPE, con un exorcismo a la antigua usanza, al loco mandril de Federico Jiménez Losantos, porque la Conferencia Episcopal sabe que, visto el resultado de las elecciones, no se puede enfrentar, a la vez, al Gobierno de Zapatero y al presidente del PP, Rajoy —a quien el mandril ha vuelto a poner de vuelta y media—, ahora que se acaba Federico, lo que era previsible de todo punto y estaba al caer, los de Vocento se han puesto de rodillas ante semejante loco, enseñando el culo y tirando por la borda el pretendido señorío, los buenos modales y la dignidad de ABC. Que santa Lucía les conserve la vista.

Hay más. Los de Vocento se han subido, in articulo mortis, al carro de la derrota electoral del PP, cuando las urnas le acaban de dar la razón al ABC de Zarzalejos, en contra de la teoría de la conspiración del 11-M, que ha lastrado la derrota de los populares. Que Santa Lucía les conserve la vista.

Y seguimos. Los de Vocento se han enganchado al tinglado de la farsa de Esperanza Aguirre en el peor de los momentos posibles, cuando creían que sería entronizada como lideresa del PP. Y ahí la tienen, derrotada en el que ha sido primer asalto, diciendo que adora a Rajoy y poniendo la rodilla en tierra, después de haber enseñado las pantaletas porque, vía El Mundo, la COPE y Telemadrid, lanzó su brigada ligera a la muerte segura, sin pensar que el de Pontevedra, rey de los Tancredos, se iba a quedar inmóvil, como era previsible, a pesar de su derrota, que derrota fue. Que Santa Lucía les conserve la vista.

Pero todo esto, que es tan sencillo y lo sabe un portugués, como los niños en Francia saben hablar francés, ¿no lo vio nadie en Vocento? Entonces, ¿a quién se le ha ocurrido organizar el zafarrancho que han montado Alcázar, Vargas y el sargento Romerales —tres frikis—, a tan sólo unas semanas de las elecciones, sin saber lo que de ellas se iba a desprender, tanto en la política como en la comunicación? Que Santa Lucía les conserve la vista.

Y, si entramos en el capítulo de las guerras mediáticas de Vocento, contra La Razón, primero, donde se han roto los morros y les hicieron una limpia de lo que les sobraba y no merecía estar allí, y contra Onda Cero, después, con la operación Alsina, también fallida, pues qué le vamos a contar. Que Santa Lucía les conserve la vista. Y, aviso a navegantes, el futuro director de ABC no será Vara, ni Losantos, como se va diciendo por ahí. Apuesto el ojo bueno de Pedro Solbes a que será José Manuel de Prada, un magnífico escritor, en edad y situación de merecer, que será tocado por los hados, en cuanto regrese de la Semana Santa de Sevilla que, seguramente, admirará desde un florido balcón, donde posaron otros, camino de la corte celestial.

Al final, los de Vocento han jugado con Aguirre contra Rajoy, han pactado con Losantos cuando está a punto de cesar —y que se cachondea del primer artículo de Expósito, mientras Antena 3TV los corren a palos (con Carlotti han topado)—, tienen a Lara preparando la venganza catalana, han intentado apuñalar en Planeta a una de las pocas personas que apoyó a Emilio Ybarra en su reciente calvario judicial, han humillado a periodistas de primer nivel y han dejado marchar al consejero independiente Echevarría a Telecinco, que se lo debe de estar pasando pipa en sus desayunos con Carlotti. Eso sí, para consolar al consejo de administración, donde saltan chispas entre los puñales, y para desviar la atención, los domingos regalan películas a granel, aunque más éxito tendría la serie de Los Soprano, que seguramente está al caer.



Publicado en: http://www.estrelladigital.es/diario/articulo.asp?sec=opi&fech=13/03/2008&name=marcello